La decisión de postular a un MBA, especialmente en instituciones de prestigio en Estados Unidos, representa un camino de autodescubrimiento, compromiso y meticuloso detalle en la preparación.
Cada componente de la postulación cuenta una historia única sobre el candidato y juega un papel crucial en determinar la adecuación con el programa deseado.
Aquí te explico un framework que yo cree en el cual dividido este proceso en tres secciones clave: Aspectos Académicos, Experiencia Laboral e Historia Personal.
1. Aspectos Académicos
Los antecedentes académicos demuestran la capacidad del candidato para enfrentar desafíos intelectuales.
Puntajes de pruebas estandarizadas: Todas estas universidades piden el GMAT o el GRE. Este artículo te explico qué es el GMAT y cuál es su estructura. Además si no estudiaste tu pregrado en una universidad en inglés, te van a pedir el TOEFL, u otro test equivalente (IELTS, Test de Duolingo, u otro, dependiendo de la institución).
Universidad y calificaciones de pregrado: El prestigio de tu programa y universidad de pregrado, tus calificaciones, el ranking de egreso, entre otros son parte de lo que vas a necesitar presentar.
La idea con todo esto es que la escuela de negocios sepa que eres un candidato capaz de aguantar y desempeñarte bien en el entorno del MBA. Ironicamente, luego el programa tiende a no ser tan exigente, pero de cierto modo con esto se aseguran que hubieses rendido bien si hubieses sido sometido a una mayor exigencia.
2. Experiencia Laboral
La experiencia laboral aporta una perspectiva práctica al salón de clases y demuestra habilidades que no pueden ser fácilmente cuantificadas por puntajes o calificaciones.
Resume / Curriculum Vitae: Las universidades buscan candidatos que hayan dejado huella en sus roles laborales. Ya sea liderando equipos, implementando cambios significativos o simplemente demostrando una ética de trabajo excepcional, es crucial resaltar estos logros.
Carta de recomendación: Aunque tradicionalmente se conoce como tal, esta no es una carta de formato libre. Se espera que quien la redacte conozca bien al postulante y pueda proporcionar ejemplos específicos sobre sus habilidades y logros. En general, es preferible que un supervisor directo o jefe redacte esta carta.
3. Historia Personal
El proceso de postulación no se trata solo de números y logros laborales. Las escuelas de negocios quieren conocer al individuo detrás de la postulación, sus motivaciones, pasiones y cómo encajarían en la comunidad universitaria.
Actividades extracurriculares: Participar en voluntariados, clubes, deportes o fundaciones aporta una dimensión adicional a tu perfil. Es esencial destacar no solo la participación, sino el impacto y liderazgo en estas actividades.
Ensayos: A través de los ensayos, las universidades buscan entender tu historia única. Cada escuela tiene su enfoque, desde las preguntas abiertas de Harvard hasta las más introspectivas de Stanford. En todos los casos, es esencial ser auténtico y demostrar cómo tu experiencia aportará valor al programa.
Video sobre esto
En el siguiente video te cuento con más detalle lo explicado más arriba